Estaba volando, rotas las ataduras con la tierra y con el terrible dolor…El viento sopló de frente, y el calor estalló en el rostro y en los ojos.
De momento ha de seguir siendo sólo mía, como lo ha sido durante estos años…
A veces, en sus sueños, parecía poderosa y radiante como siempre la había visto; la belleza parecía ser su vestimenta…
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