Se refleja en el espejo, la caída de una pequeña gota de agua, en ella la ira hace presencia… Una pequeña gota de agua, agua de un color magenta, cargada de sentimientos, aunque no todos ellos vienen de un mismo hecho… Espera, ¿es una gota de agua, o una lágrima que ha estado desesperada por salir de los ojos de su dueño?

Levanta más el espejo, enfoca mejor, se ve… se ve la dulce cara de una niña, la dueña de esa gota de agua, perdón, mejor dicho, de esa lágrima que va cargada de ira…

[…] Pasa el tiempo, ya no es una sola lágrima, ya se puede ver la forma de un charco en la moqueta, un charco cargado de lágrimas, lágrimas que… han salido desesperadamente de sus ojos… Ya no está sola esa lágrima cargada de ira, ahora hay muchas más y no van todas llenas del mismo sentimiento…