Combatiendo molinos gigantes por ti...
Aun hoy, creen que soy un loco vagabundo
Abro un libro y me asomo a tu mundo
Déjame con mi extraña locura aquí

Apareciste en mis sueños, y me llenaste de vida, quizás no existas pero me has hecho feliz con los recuerdos de esos sueños...








 <<Tanto tiempo llorando por un hombre para acabar amando a una mujer>>

Como explicar con palabras los sentimientos que te desgarran el alma, los mismos que hacen que tu cara se inunde en lágrimas…

No importa lo que digas, siempre será a ti a quien miren por encima del hombro…

[...] Cuando no queden virtudes por defender... caerás...

Luchando contra la luna sin razón alguna, esperando una señal de la estrella más próxima, pidiendo a gritos alguna ayuda… Nadie contesta a los gritos, tal vez porque nadie los oye, tal vez porque nadie ayudaría a alguien en una absurda lucha sin sentido…

~Esperando algo que no existe~

Acostada en su cama, con la ventana abierta oye a los animales en la calle, perros ladrando, mientras un gato gime, aparentemente de dolor…

Intenta leer, pero no puede, su mente no se concentra. Piensa en otras cosas y no puede concentrarse en lo que lee, aparte, los gemidos de ese gato…la hacen entristecer aun más…

Pequeño gato no eres el único que llora esta noche…

Como en el principio, retorno al comienzo del juego, mismos jugadores, el mismo tablero de juego aunque con distinta imagen que hace creer que es nuevo cuando en realidad, se trata del mismo…

Al final del juego, mismos perdedores…

Misma partida, distintos tiempos.

Dispuesta a cruzar la calle, retrocede, da la vuelta y regresa a casa, no se encuentra cómoda hoy consigo misma. Decide quedarse en casa, una tarde más, sentada en el sofá viendo pasar las horas delante de la televisión o simplemente sentada en la cocina mirando a la nada. Algo le pasa, o eso da a entender, no se encuentra bien, está... triste.

Aunque lo niega, en sus ojos se ve…

<<Siempre hay vacíos dolorosos y es ahí donde los deseos imposibles entran en juego>>

Solo una pregunta...¿Por qué?

                                                                              Cuando los angeles lloren sangre...

Se refleja en el espejo, la caída de una pequeña gota de agua, en ella la ira hace presencia… Una pequeña gota de agua, agua de un color magenta, cargada de sentimientos, aunque no todos ellos vienen de un mismo hecho… Espera, ¿es una gota de agua, o una lágrima que ha estado desesperada por salir de los ojos de su dueño?

Levanta más el espejo, enfoca mejor, se ve… se ve la dulce cara de una niña, la dueña de esa gota de agua, perdón, mejor dicho, de esa lágrima que va cargada de ira…

[…] Pasa el tiempo, ya no es una sola lágrima, ya se puede ver la forma de un charco en la moqueta, un charco cargado de lágrimas, lágrimas que… han salido desesperadamente de sus ojos… Ya no está sola esa lágrima cargada de ira, ahora hay muchas más y no van todas llenas del mismo sentimiento…

Abusando de palabras desconocidas, hablando más de la cuenta quedando como un pedante, utilizando conectores en sitios equivocados, poniendo énfasis a las frases más suaves, gritando pidiendo la razón, escondiendo los pecados que por la boca han salido entonando la culpa de quien no la tiene…

Al otro lado la paciencia, callada, sentada en un pequeño muro haciéndose daño con su mala estructura, que por el paso del tiempo se encuentra en mal estado… Ella tan tranquila, aunque por dentro llena de rabia pero si algo siempre se le ha dado bien es aguantar… Buscaba la manera más cómoda de estar, mientras otros a su lado, hablaban hipócritamente sobre sus asuntos, alterando mientras hablaban cada escenario.

Soñaba con tu caída, soñaba con tus lágrimas de dolor, soñaba con tu muerte… Tu cara de dolor, tu sangre en el piso, tus lágrimas que bañaban tu bruta cara… Aquellos gritos de dolor que atravesaban mis oídos, que torturaban mi mente y perturbaba mi ser…

Cuando con mis ojos vi, tu cuerpo yacer en el piso, mi sonrisa se iluminó junto con mis ojos… ¿Qué debía hacer? ¿Recogerte o dejarte que te pudrieras ahí como te merecías? Difícil elección, o alomejor no tan difícil… ¿A quién dejo actuar, al odio, asco y rencor o a la compasión?

Después de todo lo que hiciste y predicaste, debería dejarte ahí y esta vez regodearme yo en el placer de verte a ti en semejante estado…

Llega el momento de tomar la decisión del qué hacer o no hacer, ya sé lo que haré… Te dejaré ahí, no hago ningún favor salvándote…

Desángrate, llora, grita, solo tú te oirás como siempre has hecho.

Líder de la acción, asume tus cargos por crímenes de guerra. Entierra a quienes has matado, cura a quien heriste, pero nunca pidas perdón a la familia de esas personas, porque esta vez tu frase “Lo siento mucho…”

No valdrá nada

<< Dime qué matarías para salvar tu vida>>

Con todo, menos amor

 Tú asqueroso engendro de Dios, que crees que has sido engendrado a este mundo para algún bien, pues no, estas aquí porque yo he querido que lo estés, porque yo soy quien te manipula, quien te ha enseñado a ser quien eres, quien te enseño hablar, a caminar… Quien te llevo por esos senderos por los que ahora caminas, y por los que algún día, volverás a tomar para llegar a mí, para que te libere de todo cargo, de esa conciencia sucia que contigo llevas… Todo, todo lo que pasa por tu cabeza sobre ti, sabes que es porque eres un ser abominable, asqueroso, repulsivo…todos esos adjetivos que al asco y sus sinónimos se refieren.

 Antes de que decida hacer tu posible destrucción, acércate a mí, tu dueña, y vuelve a arrastrarte, como una miserable rata…

 Ni el sustantivo de rata mereces llevar, semejantes animales no merecen llevar el insulto que conlleva ser tú, prefiero catalogarte como un esperpento, porque sabes que eres ridículo y un insulto para la vida misma, sin nombrar, a la pobre Tierra, que tiene que soportar que en ella vivas y te reproduzcas… ¡Ah! Es cierto, ¿tú reproducirte? Jamás, ningún ser humano, ni ser viviente, tales como los animales, tendrían corazón o escrúpulos para reproducirse contigo, antes todos preferirían la muerte o ser torturados eternamente por los dioses griegos… Eso 
sería una bendición, antes que acercarse a ti o saber de tu existencia.